El parque Riegrovy sady es un inmenso parque que se llena rápidamente; cuenta con la misma popularidad de los barrios que lo rodean. Aquí vienen las madres con sus cochecitos, otros sacan a pasear a su perro, corren o hacen ejercicio con los aparatos que se encuentran allí o también se organizan pícnics. Para calmar la sed, los visitantes del parque no tienen que ir a ninguna parte. Una zona de este espacio verde la ocupa un sencillo bar al aire libre, donde sirven un refresco de frambuesas (malinovka en checo) y donde los amantes de la cerveza encontrarán cerca de 8 tipos de cerveza de la cervecería Zemský. Es el lugar ideal para salir durante los calurosos días de verano y para encontrarse con los amigos en las noches y disfrutar de una bebida.

El ambiente es relajado y los precios no nos dejarán con un hueco en el bolsillo. A diferencia del espacio similar ubicado en Letná, aquí la cerveza nos la sirven en vasos de vidrio, no de plástico. La oferta de comidas es limitada, pero no moriremos de hambre. Siempre y cuando hagamos la fila, indudablemente obtendremos una salchicha asada.