Para muchos, el Reduta es, junto al AghaRTA, el club de jazz más simbólico de la ciudad, sobre todo a causa de su intensa historia. Abrió sus puertas en 1957, por lo que es indiscutiblemente el más antiguo del país. También ha albergado representaciones teatrales y aquí fue donde se realizó el primer espectáculo de “teatro negro” de Bohemia.

En sus comienzos, el club pasó por ciertas dificultades: hay que decir que, en los años 50, el régimen comunista no tenía mucha simpatía por el jazz. Era incluso considerado como una música imperialista. Por ello, los jóvenes aficionados a este estilo empezaron a buscar un lugar donde satisfacer sus gustos sin que les molestaran. Según fuentes de la época, fue el bajista Jan Arnet el que acabó descubriendo en 1957 este edificio en la avenida Národní třída, cuyo sótano, abandonado, demostró al poco tiempo ser el lugar ideal.

Durante su larga historia, el Reduta ha recibido a los más grandes del jazz: Louis Armstrong, Tony Scott, B.B. King, Winton Marsalis, Chick Corea, Dee Dee Bridgewater y hasta a la Glenn Miller Orchestra, sin contar unas cuantas representaciones del célebre mimo Marcel Marceau. En cuanto a los espectadores célebres, cabe citar a varios presidentes checos y extranjeros: Václav Havel, Václav Klaus y Bill Clinton. El entonces presidente americano, gran aficionado al jazz, tocó en el Reduta durante una visita a Praga en 1994.

En la actualidad, el club presenta sobre todo conciertos de grupos y de solistas extranjeros, e incluso a veces big bands. Así pues, es posible ver en cartel a tríos de jazz contemporáneo o a la American Youth Jazz Orchestra y sus… 42 músicos. En cuanto a los jóvenes talentos, tienen oportunidad de darse a conocer durante los conciertos para estudiantes del ciclo Youth Stage.

Aunque el Reduta esté situado en la parte turística de la ciudad y sea muy conocido entre los turistas, no se ha convertido en una trampa para turistas. El club no ha renunciado nunca a tratar a sus huéspedes con respeto e insiste en una producción musical de calidad. Aquí, el jazz no representa un simple entorno sonoro agradable para acompañar una buena cena. El club tiene como ambición contribuir al desarrollo de una música de calidad. Este es uno de los motivos por los que organiza concursos de jóvenes talentos del jazz.

 Dónde
Centro de la ciudad | Ciudad Nueva
 Tipo de establecimiento
Nuestros favoritos | Club de jazz
 Costo
$$
Wi-fi gratis
Accesible para discapacitados
Terraza
Adecuado para familias con niños
Acepta animales
Tarjeta de crédito

Y si al final ya no nos apetece escuchar jazz o si el club está completo, no pasa nada: justo al lado encontramos el Rock Café, donde nos espera el bar de la primera planta.

Jan, Avantgarde Prague
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