Praga en diciembre
En Praga, el mes de diciembre se caracteriza por un ambiente mágico y festivo. Las calles se iluminan con decoraciones de colores, la Plaza de la Ciudad Vieja acoge un magnífico árbol de Navidad y el bullicio alcanza su punto álgido con la llegada de las fiestas.
Los mercados navideños de Praga son una atracción que no debe perderse bajo ningún concepto durante su estancia en Praga en diciembre. Allí podrá comprar numerosos recuerdos y objetos tradicionales.
En la República Checa, las fiestas de fin de año están marcadas por importantes tradiciones que se remontan a siglos atrás. Entre ellas, destaca la llegada de San Nicolás el 5 de diciembre. El hombre barbudo va acompañado de un ángel y un demonio que recompensan o castigan a los niños por su comportamiento durante el año transcurrido. El primero reparte dulces, mientras que el segundo da al niño un trozo de carbón o una patata.
Los coros infantiles también forman parte de las costumbres de la República Checa. A menudo se instalan escenarios en los mercados navideños y seguramente tendrá la oportunidad de escuchar villancicos mientras hace algunas compras en los mercados.
Aunque las temperaturas son relativamente bajas en esta época del año, descubrir la capital checa en invierno sigue siendo muy emocionante. A veces, la nieve hace acto de presencia y cubre por completo la ciudad con su manto blanco, ¡lo que garantiza un ambiente navideño! También es una buena ocasión para tomar una buena copa de vino caliente, una taza de chocolate caliente para entrar en calor y degustar las deliciosas y abundantes especialidades culinarias checas que le darán energía para los largos días de descubrimiento.
Por ejemplo, comience su plato con una sopa, una costumbre culinaria adoptada por los checos. Caldos, sopas cremosas, sopas de verduras... ¡Tendrá donde elegir! Como plato principal, pruebe el tradicional goulash o la svíčková, dos platos típicos con salsa, que podrá acompañar con una cerveza, ¡la bebida nacional checa!
Nuestras tres actividades favoritas para hacer en Praga en diciembre
Una visita guiada por la ciudad con un guía local
Ya sea para visitar la Ciudad Vieja, el barrio judío o el Castillo de Praga, siempre es interesante recorrer una ciudad con un guía local.
Si hace demasiado frío fuera y buscas una actividad para hacer en casa, ponte el delantal y déjate llevar por tu creatividad. Te irás con una pieza única y un recuerdo muy personal: una taza, un cuenco, un plato... Hay una gran variedad de objetos para decorar.
En pleno invierno, siempre es agradable sumergirse en una piscina climatizada, disfrutar de un jacuzzi y de espacios de bienestar. Entre baños de cerveza, jacuzzis privados con vistas o rituales de cuidados para dos, elija su momento de relajación durante su estancia en Praga en diciembre.
Las fiestas de fin de año en Praga
En la República Checa, la Navidad es una fiesta que se celebra con numerosas tradiciones. La noche del 24 de diciembre, los checos comen carpa empanada acompañada de ensalada de patatas. Las escamas del pescado suelen guardarse como amuleto de buena suerte para el año siguiente. Algunas familias vierten plomo fundido en agua para intentar adivinar lo que les depara el futuro.
Si pasa la Nochebuena en Praga, ¡no olvide reservar su cena con antelación! Muchos restaurantes cierran la noche del 24 de diciembre y es casi imposible reservar mesa a última hora. ¡Eche un vistazo a nuestra selección de menús de Navidad!
En Nochevieja, el centro de Praga se llena de ambiente festivo y animado. Los checos suelen preparar chlebíčky, unas tostadas cubiertas tradicionalmente con ensalada de patata, lonchas de jamón, pepinillos, pimientos y huevo duro. A medianoche, una tradición dicta que se coman lentejas, para que traigan dinero durante el nuevo año.
Para la noche de Fin de Año en Praga, se organizan numerosas fiestas, con ambientes y temáticas para todos los gustos y presupuestos. No dude en consultar nuestra selección de fiestas de Nochevieja.
