Iglesia de Nuestra Señora de la Victoria

La iglesia de Nuestra Señora de la Victoria es uno de los lugares de peregrinación más famosos de la Chequia. Alberga la estatua de cera del Niño Jesús de Praga (o Bambino di Praga) de origen español, objeto de devoción de peregrinos de todo el mundo.

El Niño Jesús de Praga es una estatuilla votiva de cera de 47 centímetros de altura que representa a un Niño Jesús de rasgos encantadores, con la mano derecha haciendo el signo de la bendición y la izquierda sosteniendo una esfera coronada por una cruz.

Procedente de España, fue entregado como dote por la duquesa María Manrique de Lara al casarse con un noble checo en 1556. Su hija, Polyxena de Lobkowicz, la donó en 1628 al monasterio de carmelitas descalzas vinculado a la iglesia de Notre-Dame-des-Victoires. Se le atribuyeron numerosos milagros durante el Barroco, entre ellos la protección de Praga durante el asedio sueco de 1639. Fue llevada en procesión por las iglesias de la ciudad en 1651 y coronada solemnemente en 1655 por el arzobispo de Praga. Peregrinos de todo el mundo siguen venerándola con fervor.

Su famoso “armario” contiene más de un centenar de preciosas prendas donadas por peregrinos, tanto famosos como desconocidos. Los mantos bordados más hermosos, así como numerosos objetos vinculados al culto de la estatua, pueden verse en el Museo del Niño Jesús de Praga, situado en la iglesia, detrás del altar mayor, en el primer piso.

El edificio en sí, con su agitada y original historia, es arquitectónicamente notable. Iniciado en 1611-1613, fue uno de los primeros templos luteranos construidos en Praga durante el reinado del emperador Rodolfo II para los protestantes adinerados que vivían en el barrio de Malá Strana. Según las fuentes, fue diseñado por un arquitecto católico, muy probablemente Giovanni Maria Fillippi, el arquitecto oficial de Rodolfo II. Muy importante para la historia de la arquitectura en Bohemia, el diseño de Fillippi (conservado en el Museo Municipal de Praga) se inspiró directamente en la arquitectura contemporánea de Roma, en particular en la fachada de la iglesia de la Trinidad de los Montes, de Giacomo della Porta. Se considera la primera iglesia protobarroca de Praga, con su nave central con bóveda de cañón y dos torres monumentales.

Todo cambió a partir de 1620, tras la derrota checa en la Montaña Blanca: la iglesia fue arrebatada a los protestantes, entregada a la orden católica de los Carmelitas Descalzos y rebautizada como Nuestra Señora de la Victoria. Los carmelitas cambiaron la disposición de la iglesia, reorientándola radicalmente de cara a la colina de Petřín a cara a la calle. Se construyó una nueva fachada, inspirada de nuevo en la arquitectura romana más contemporánea y en el modelo de Santa Maria della Vittoria de Roma, cuya historia también está estrechamente ligada a la Batalla de la Montaña Blanca. Las dos torres del proyecto de Fillippi nunca llegaron a completarse, y la antigua fachada fue sustituida por un coro muy tradicional con arcos ojivales góticos.